#7. No hacen contacto visual
Los niños son típicamente familiares por naturaleza, les encanta interactuar con sus padres, hermanos y otras personas.
Reconocen caras y escuchan voces, y siempre están observando lo que la gente hace y dice.
Sin embargo, los niños con autismo pueden tener más dificultades para interactuar con los adultos y pueden no responder al contacto visual o a las palabras de los padres.
El Instituto Nacional de Salud Mental explica que los niños con autismo pueden tener «una tendencia a mirar y escuchar a otras personas con menos frecuencia».
Por favor, aunque no esté seguro, haga que su hijo sea evaluado cuanto antes, mejor.