Alrededor de 44 millones de personas en todo el mundo padecen la enfermedad de Alzheimer y 5,5 millones la sufren dentro de EE.UU. La enfermedad de Alzheimer puede ser una enfermedad neurodegenerativa que afecta al tejido cerebral y a las conexiones entre las neuronas. es una enfermedad progresiva e irreversible que provoca amnesia, aumento de la ansiedad, cambios en el comportamiento, cambios en el pensamiento y, por tanto, incapacidad para terminar las tareas diarias. afecta siempre a personas mayores de 65 años y, por tanto, el riesgo aumenta con la edad.
Es importante averiguar la forma de detectar los primeros signos de la enfermedad de Alzheimer, especialmente si usted o un ser querido está en una edad de riesgo. esto puede ayudarle a entender más sobre la enfermedad y a prepararse para el largo plazo. He aquí 9 síntomas tempranos de la enfermedad de Alzheimer a los que hay que prestar atención.
1. Problemas de vocabulario
La enfermedad de Alzheimer también afecta a las partes del cerebro responsables del lenguaje, lo que provoca problemas para recordar palabras o para buscar «la palabra correcta» para un objeto cotidiano. Otro signo precoz es el uso incorrecto o la confusión de palabras. Hay dificultad para concentrarse y seguir la conversación, sobre todo después de una interrupción. Normalmente, la persona es consciente de estos problemas e intenta compensarlos.
2. Pérdida de memoria
Se trata de uno de los signos tempranos más comunes de la enfermedad de Alzheimer y, sobre todo, implica la pérdida de las MTS. La persona experimenta problemas para recordar cosas que acaban de ocurrir o información recientemente aprendida. La persona olvida fechas o acontecimientos importantes y siempre hace una pregunta equivalente una y otra vez. Suele tener que crear notas recordatorias, dispositivos electrónicos o relaciones para recordar cosas.
3. Problemas para determinar el tiempo y el lugar
Las personas con EA sufren una distorsión del tiempo, les cuesta adquirir nuevos recuerdos, tienen la sensación de estar atrapados en el tiempo. Desde su perspectiva, el tiempo pasa más rápido para ellos que para las personas sin EA. Subestiman el tiempo gracias al hecho mismo de que no pueden recordar todos los acontecimientos del pasado a corto plazo, por lo que sienten que ha pasado menos tiempo. estarán preparados para recordar acontecimientos personales que ocurrieron hace décadas, pero les cuesta recordar lo que ocurrió hace un par de horas.
También se olvidan de dónde están o de cómo tienen que llegar al lugar. Esta señal es peligrosa porque una vez que están conduciendo se desvían.
4. Dificultad para planificar o resolver problemas
Les cuesta hacer planes y persistir en ellos. Actividades sencillas como seguir una receta se vuelven imposibles, aunque la persona la haya utilizado ya varias veces. Resulta difícil plantearse tareas como resolver problemas matemáticos básicos, llevar la cuenta de las facturas o llevar un talonario de cheques.
La persona no puede realizar actividades normales como seguir los principios de un juego, crear una lista de la compra, usar el pc o el smartphone también tiene problemas para conducir a un lugar conocido.
5. Cambios de criterio
Las personas que se encuentran en las primeras fases de la EA empiezan a mostrar una incapacidad para tomar decisiones adecuadas. No tienen en cuenta todos los factores necesarios para tomar una decisión, por lo que sus decisiones parecen irresponsables o inapropiadas. No son capaces de reconocer el peligro, por ejemplo, les cuesta cruzar una calle a una hora y con mucho tráfico. Estos cambios de juicio también pueden incluir el dinero, las personas que eran cautelosas con su dinero empiezan a regalarlo a extraños, aunque sea dinero que no tienen o que poseen.
El mal juicio incluye comportamientos inapropiados de un hombre que coquetea con una desconocida cuando sale con su mujer.
Las malas decisiones también se reflejan en su forma de vestir. Por ejemplo, puede ser un día frío de invierno con nieve, pero llevan pantalones cortos y una camiseta.
Otra llamada de atención es cuando dejan de prestar atención a la apariencia no pública, esto incluye el aseo o la higiene personal.